Recién a los 52 minutos del primer tiempo, en el octavo minuto de adición tras varios cortes, llegó el quiebre: penal polémico de Lagos sobre Prestianni y gol de Ángel Di María para el 1-0. A partir de ahí, el trámite fue todo del equipo de Bruno Lage.
El segundo tiempo inició con demoras por una fuerte tormenta eléctrica que obligó a desalojar parcialmente las tribunas del estadio en Orlando. Tras una espera de más de media hora, se reanudaron las acciones y Benfica no tardó en liquidarlo.
Vangelis Pavlidis marcó el 2-0 a los 52 minutos de juego, apenas comenzado el complemento, y luego llegó el turno de Renato Sanches, quien anotó el tercero tras una gran combinación ofensiva. Leandro Barreiro, figura del partido, marcó un doblete, y Di María otra vez de penal, que selló el resultado final.
Más allá del resultado, la gran polémica del partido estuvo en el penal sancionado sobre el final del primer tiempo, que generó reclamos en el banco neozelandés y también malestar en Boca, atento desde la concentración en Miami. Las repeticiones mostraron que Prestianni cayó con facilidad y sin contacto claro, pero el árbitro no recurrió al VAR y mantuvo su decisión.
Con este resultado, Benfica lidera el Grupo C con 4 puntos (+5), seguido por Bayern con 3 (+10) y Boca con 1 (0). Auckland, con dos derrotas, ya está eliminado. El cierre del grupo será el próximo lunes, y todo indica que Boca necesitará un triunfo ante los bávaros para llegar con chances al duelo final contra Auckland.
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